24 julio 2007

Destino: Bogotá, Colombia. A la Boda de Liliana y Juan Pablo



Los Actores de esta Obra:
Lili: La novia, partner de buceos y otras aventuras y a quien conocen de múltiples faxes.

Juan Pablo (JP): El novio, a quien no conozco aún, pero debe ser un tipazo!

Aída: Madre de la Novia, y por obra y gracia de Nuestro Señor Caído de Monserrate, MÉDICA, quien me salva la vida, como leerán a continuación.

Héctor: Padre de la Novia, ídolo de multitudes, orgulloso propietario del Mustang rojo!

Ilse y Adita: Hermanas del papá de Lili (Héctor) quienes tienen la dura misión de agasajar y entretener a Elba y Ber (O sea, y en buen paraguayo, nuestras Tomasitas!)

Miguel, Mike para los íntimos: Hermano de la mamá de Lili (Aída), quien a los cinco segundos de conocernos, ya está haciendo planes para unírseme en el próximo Carnaval de Rio.

Elba: amiga de Lili, mejicana, vive en Miami. Su destino y el mío ligados, ya que ambos venimos desde lejanas tierras, hemos sido embestidos con la distinción de ser padrinos, y nos toca andar juntos.

Orlando y Bélgica: Él, Colombiano, amigo de Lili y ella, Venezolana, su novia, ambos viven en Costa Rica y ya verán más abajo su papel en el desenlace de esta historia.



Londres a Bogotá.
El Underground lentísimo. Si no fuera porque los vuelos están re atrasados, me quedo.
El vuelo a Buenos Aires con escala en Sao Paulo: A TRA SA DI SI MO. Lleno de argentinos. TODOS expertos en aviación.
Despegamos y caigo PROFUNDAMENTE dormido. Me despierta un tremendo alboroto.

‘Que nos ha pegado un rayo. Que me lo ha dicho la azafata’ Le grita un señor español con cara de horror a una señora con mueca de susto.

‘Fue una luz... no la viste?, como un Ovni!’ Vocifera una mujer de ojos desorbitados y acento porteño.

‘Y el avión va alto mi amor?’ Una joven en el asiento de adelante, con pinta de luna de miel.

‘Ud. no se preocupe mi cielo’ Contesta él, gallardo cual prócer.

Yo voy tan, pero tan cansado, que me doy la vuelta y sigo durmiendo hasta que aterrizamos en Sao Paulo. Jamás sabré que fue lo que pasó.

Escala de 24 horas en Sao Paulo. La ciudad estresada. Los transeúntes en estado de alarma continua. Caminás más diez pasos cerca de alguien y ya se pone a liberar adrenalina y dirigirte miradas nerviosas. Como si lo fueras a asaltar.
Los edificios de la Avenida Paulista exhaustos, con señales de daño permanente, ulceras y laceraciones. Están descompensados. Un caserón de inicios de siglo pasado, abandonado, sufre cáncer y problemas cardiovasculares, se cae a pedazos.

Mato el estrés en una churrasquería brasilera, a picanhasos limpios y con abundante caipiroska!
Al día siguiente a las tres de la mañana continúa la vuelta al mundo en dos días.

‘Se recuerda a los distinguidos pasajeros que no deben remover los chalecos salvavidas de debajo de los asientos. Además de ser ilegal, atentan contra la seguridad de otros pasajeros en caso de emergencia’ reflexiono que no somos tan distinguidos si nos tienen que recordar esto!

‘No se debe fumar a bordo’ continua la muy amable azafata ‘... en los baños hay dispositivos detectores de humo! Evite ser penado por la ley y,... no los toque’. El vuelo de Sao Paulo a Bogota operado por Avianca, lleno de instrucciones de lo que uno debe y no debe hacer a bordo.



Bogotá
Esta misma noche, en el departamento de Lili y JP, es la de los regalos y la lluvia de sobres.
Explico: Es tradición Colombiana que una noche, algunos días antes de la boda, la familia y amigos más cercanos lleguen a la casa con los regalos o sobres con CASH! En el caso de Lili y JP siendo que ya tienen el departamento montado, me imagino que se impone el Cash!

Entre los amigos, Elba, quien llega de Miami sólo unos minutos detrás de mí. Orlando y Bélgica, que son Buzos. Inmediatamente nos ponemos de acuerdo para hacer las actividades turísticas juntos, ya que es la primera vez de Bélgica en Colombia.

BUE NÍ SI MA la noche! Me llama la atención la obsesión de este pueblo por hablar un español perfecto, aunque creo que ellos no son consientes de esto!

IN FAL TA BLE: La serenata de Mariachis de JP para Liliana.

A la mañana siguiente Ilse y Aidita nos buscan para subir el Cerro Monserrate (en Funicular, y no de rodillas como correspondería a mis pecados!) Nos encontramos allí con Orlando y Bélgica. En la cúspide una Iglesia donde habita el Señor Caído: IM PRE SIO NAN TE! La iglesia sencilla, salvo por una capillita atrás donde unos ángeles de alas revueltas hacen de las suyas.

De ahí a toda velocidad al centro antiguo de la ciudad colonial. Vamos al Museo del Oro, donde te cuentan la mística historia de cómo el oro, extraído en pepitas de los ríos, es transformado en obra de arte, que a su vez es ofrenda y debe retornar a la naturaleza para satisfacer a los dioses, siendo arrojado a la profundidad de la laguna de Guatavita y otros muchos lagos. La Laguna de Guatavita fue formada por un meteorito hace unos 2000 anos, lo cual da origen a todo tipo de leyendas entre los Amerindios (que cool no?)

El jaguar y el puma simbolizan en el pensamiento Amerindio el poder y la fuerza masculinos así como la destreza y sagacidad del cazador y guerrero.(WOW!).

Las esmeraldas y el oro abundan en todo tipo de elementos de uso diario. Tipo joyas. Dizque el cincuenta por ciento de las esmeraldas del mundo provienen de Colombia... Será?
También en oro los utensilios para el consumo de la Coca. Por ejemplo un mate que los colombianos insisten en llamar poporo pero finalmente entendieron que se llama MATE! La coca es utilizada por los caciques en la transmisión del conocimiento sagrado y la comunicación con el mundo espiritual

La famosa balsa Muisca A LU CI NAN TE... no me la imaginaba tan miniatura... BE LLA!

La sala de la ofrenda: PI EL GA LLI NEZ CA!

Les recomiendo el web site del Museo del Oro, tiene fotos espectaculares de casi todos los objetos con detalladas explicaciones. http://www.banrep.org/museo/esp/home.htm

Salgo del museo con un soroche FE NO ME NAL. En colombiano: Un dolor de cabeza MA XI MO! Aclaro que no del museo, y no creo que consigamos descifrar exactamente de que!

‘Que te tomes agua con gas’ es la opinión experta de Ilse y sale disparada a comprar una botellita.

‘No! Que agua sin gas’ Dice alguien, no sé quien, con tono autoritario.

‘Un Tinto... que se tome un tinto’ Dice Aidita y alguien me explica que en Colombia un tinto es un cafecito y no una copa de vino!

‘Un sándwich de roast beef’ Asegura Orlando ‘Los de Charlie’s son buenísimos. Curan todos los males’

‘Una Coca cola?’ contribuye Bélgica con gran sonrisa y hoyuelos, como animándome.

‘Yo creo que algo dulce’ Dice Elba a quien veo al final de un túnel caleidoscópico ‘Para que te vuelva el color!’

‘Nooo...algo salado’ Es Orlando?

‘Pero mi niño! Tómese toda la botella de soda’ me regaña Ilse, que se ha dado cuenta de que no me la tomé!

‘BASTA!’ Pienso. Pero les juro que no me sale nada. Yazgo inerte. Moriré en esta tierra lejana y no traigo nada digno de mi ajuar funerario.

El asunto es, que el programa consiste en ir a la Catedral de la Sal de Zipaquirá. No tengo idea de lo que es, ni me importa...sólo quiero sentarme y morir!... pero Liliana opina:

‘Ber,... conociéndote como te conozco no te vas a querer perder la catedral de la Sal, VERDAD? O preferís quedarte en cama? VERDAD QUE NO?’ Pregunta Lili, HO RRO RI ZA DA.

Elevo mi mirada a los cielos y pienso ‘Tomame Ahora Señor’. Pero lo único que veo es el techo del estacionamiento subterráneo del edificio de Lili, donde transcurre este debate.

‘No claro, of course, vamos sin más demoras a la catedral’ Consigo emitir. Y partimos urgentemente Orlando, Bélgica, Elba, y vuestro servidor, poseído por el espíritu de las tinieblas.

‘Cualquier cosa me lo traen y lo internamos’ es la última instrucción de Aída, quien me ha diagnosticado que el cambio de altura entre Monserrate y etcétera es lo que me tiene a mal traer.

Lo ultimo que recuerdo es que de camino paramos en Charlie’s donde nos hacemos con sendos Roast Beefs con papas fritas y milk shakes,... dos para cada uno. Caigo desmayado.

La Catedral queda a no sé cuantas horas de Bogota.
En uno de esos momentos en que abro un ojo exploratorio me preguntan si no me importa que se dividan mi combo Charlie’s.

A medida que nos acercamos a la Catedral me siento peor. Totalmente AN TI CRIS TO... Cuando estacionamos frente a ella, salto del carro con agilidad que sorprende a mis acompañantes y comienzo a vomitar a lo EL EXORCISTA!

Cabe destacar lo fino de mis acompañantes, y los guardias del estacionamiento, quienes mientras me sacudo con espasmos giratorios y lanzo chorros en todas las direcciones, cual zombi de película de terror, miran en dirección contraria y fingen que nada ocurre, con comentarios tipo ‘Suerte que ya no hace tanto calor, verdad?’ y del tipo.

En fin, ingresamos a las catacumbas de la vieja mina de Sal. Según yo lo que vamos a ver es una capilla construida con sal fina prensada en alguno de los corredores de la mina de sal... pero no estoy preparado para una mina de sal transformada en catedral. Un laberinto donde todos los caminos conducen a Dios, musicalizado con cantos gregorianos. Espero y espero encontrarnos a los Monjes Salinos cantando cual coro de ángeles, pero me informa el guía que es una grabación. 'Que Cachi!' como diría mi hermana Chachi...
El guía un personaje de novela. Toda explicación acompañada de gestos aburridos como que lo ha explicado quinientas mil millones de veces y está harto! Es más bien él quien nos hace preguntas a nosotros y no al revés.
Mis compañeros de jornada se mantienen unos pasos al frente o detrás de mí. O esperan un BIS o no quieren ser asociados con el poseso.
Al salir de las catacumbas de sal me siento mejor, sino bien del todo. No sé si por el olor a azufre, la oscuridad, o la purificación antes de entrar.

A la noche, JP parte a su despedida de soltero.
Nosotros con Liliana a Andrés Carne de Res. Es, como su nombre lo indica, un Restaurante de Carne. Está en Chia, como a media hora de Bogotá, lo que para los Bogotanos es LE JI SI MOS... Evidentemente un local para farrear hasta morir: el lugar es un viaje psicodélico.. GUE NI SI MO!

Yo actitud de lechuga y agua, of course, dada mi delicada situación gastroentereológica y siquiátrica... Elba pide una botella de tequila, un plato de sal y una canasta de limones! SANTO MARTILLO BATMAN!

La botella arriba y desde ella una imagen de la Virgen de la Guadalupe, me guiña un ojo!
Elba ofrece-me un tequilita con Sprite, santo remedio para todos los males. Dudo. Al final que tengo por perder? Peor no voy a estar, es mi conclusión.
Así es la vida. Ni antes de ajustarme a la diferencia horaria, la altura, el dolor de cabeza... toca beber –forzado- el tequilita.

Varios tequilitas después, y bifes y mandioca frita y que se yo más! ES PLEN DI DO!

‘Ber, tu manejas!’ Anuncia Lili a la salida, cuando ya cierran el local.

‘Y pa donde voy?’

‘Tu sigue los cartelitos que dicen Bogotá!’

‘Pero no tengo ni licencia!’


Girardot
8 a.m. me arrastro cual lagartija hasta el carro. Loas a JP quien habiendo llegado de la despedida de soltero hace sólo minutos, conduce las tres horas hasta Girardot.
El tiempo pasado en Girardot: BA CAN... al menos para las visitas. (O sea Elba y yo) Nos la pasamos en la piscina y bebiendo Cerveza Águila, la bebida oficial del viaje a Colombia. Siendo llevados de aquí para allá y presentados a todo el mundo cual celebrities.
El día de la boda salgo a trotar temprano al son de Juanes y la camisa negra. Los lins de golf musicalizados con Ibisses y Papagayos, decorados con plantas de mango y de jazmín. Totalmente PA RA GU AY!

Almorzamos Sancocho: Un pucheraso con Yuca y platano ... DE LI CI O SO! Parecido al que hacen en Honduras y Republica Dominicana.

Partimos a la boda. La novia llega en un Mustang rojo de colección, propiedad de Héctor, EUGS PEC TA CU LAR!

‘Ya entregue tres novias con este carro’ me confesó orgulloso a la mañana mientras lo lavaba con caricias y masajes.

El casamiento al aire libre. Atardece. La luz del sol intensifica el verde de la vegetación y la temperatura retrocede. A nuestro alrededor las flores exhalan su aroma, las cigarras empiezan su traca-traca y los pájaros se acomodan ruidosos en los árboles. Una colonia de cotorras se prepara para dormir mientras Lili y JP se casan.

La tenida de los asistentes: Los varones con rigurosa guayabera y las damas de gran soiré. Yo luzco una guayabera regalo de Carmi desde Panamá.

El Cura y primo de JP, Bernardo Botero, CE LES TIAL! Me emociono. Y saben muy bien que no es lo mío. Pero realmente me toca lo que dice. Algo sobre ‘la forma en que cada uno decida interpretar el amor de Dios’ o algo así.

Elba y yo PA DRI NI SI MOS...

Brindis de los padres junto a la piscina. Luna llena mega-WOW. Gente, Que producción! Que producción! Hasta los últimos detalles!.

De ahí a la Cena y Parranda. En el centro de la gran estructura de Bambú un escenario con orquesta, enfrente del cual la asistencia se sacude sin tregua, reponiendo energías en la fuente de chocolate, ES TRA TE GI CA MEN TE ubicada al otro extremo de la pista de baile.


La acción transcurre de lo más civilizada hasta que distribuyen botellitas de Tapa Roja, el Rum del pueblo de JP. Un agua ardiente anisadito... ñami, ñami!

Y bueno... será que hace falta que recuente lo que pasó? Los presentes no creo que puedan olvidar las locuras de la noche y quienes no estaban se las pueden imaginar.

Entre pieza y pieza de baile uno vuelve a su mesa a recuperar el aliento con los whiskies, vodkas y abanicos provistos para el efecto. En una de esas, una señora me pregunta si no ví sus anteojos. Le decimos que esta no es su mesa y ella insiste que si!

‘Será que reorganizaron las mesas mientras me fui a bailar?’ Yo digo que lo que perdió fue el sentido de la orientación por las vueltas en la pista de baile.

Bailé hasta que me salieron ampollas, me desgarré más de un músculo y destrocé mis pantalones. Todo culpa de la Guayabera Panameña POSEÍDA POR SATÁN que me regaló Carmi! Ya saben que los Panameños no es que quieran mucho a los Colombianos. Toca lavarla con agua bendita tu! Me queda la esperanza que mi locura haya pasado desapercibida en medio de las de los amigos de JP.

A eso de la medianoche sirven unas patatas y platanitos DE LI CIO SOS... pero el daño del Tapa Roja ya es irreversible.

Me despiertan hordas de ruidosos pájaros tropicales y prácticamente toca partir. QUE DOLOR DE CABEZA.


Cartagena de Indias
El vuelo a es con escala en Barranquilla, aunque no veo ningún caimán en el embarque. Al llegar a Barranquilla anuncian que este es un vuelo a Bogotá con escala en Cartagena.
El aterrizaje en Cartagena, lo más parecido a bajar una montaña en un coche bala. Como me imagino debe ser practicar Bobsleigh. Instintivamente algunos pasajeros adoptan la posición de aterrizaje de emergencia. Otros, novatos, gritan. Rezan por su salvación. Veo con horror por la ventanilla que a esta velocidad vamos a pasar de largo el aeropuerto. Pero no. Llegamos sanos y salvos.

Cartagena de ‘Romancing the Stone’, queda en el Caribe. Pero les prometo que la película no se filmó aquí pues no reconozco los edificios, y no hay ni pista de los cocodrilos. (Quizá la filmaron en Barranquilla?) Créanlo o no, desde aquí, Colombia tiene fronteras marítimas con Jamaica, Haití, Republica Dominicana, Honduras, Nicaragua y Costa Rica... que tal?

Me alojo en el Hotel Monterrey, frente al Muelle de los Pegazos y a la Torre del Reloj, fuera de la ciudad amurallada, en Getsemani (El amor en los tiempos de cólera!)

Por supuesto salgo inmediatamente en misión de reconocimiento.

Problema de Aritmética: Si uno sale de Girardot a 300m sobre el nivel del mar a las dos de la tarde, y llega a Bogotá, a 2600m de altitud tres horas después, toma un vuelo a Cartagena, y esa misma noche retorna al nivel del mar.... Pregunta: Cuantos Rum con Cola debe uno tomarse al aterrizar en Cartagena para ecualizar los cambios de altura?

A la mañana siguiente encuentro con Orlando y Bélgica que acaban de llegar de Bogotá e iniciamos el recorrido por la ciudad amurallada -El corralito, como cariñosamente le dicen sus habitantes.

Empezamos en La Puerta de la Torre del Reloj y La Plaza de los Coches, donde no hay ningún coche. Avanzamos por el Portal de los Dulces, donde si hay hartos dulces, y la Plaza de la Aduana. De ahí al Convento de San Pedro Claver, defensor de los esclavos y primer canonizado del nuevo mundo. Continuamos por la muralla, pasando por el Museo Naval del Caribe, La Plaza Bolivar, quien Bélgica insiste que NO es colombiano y el Palacio de la Inquisición, frente al cual atacamos sendas rodajas de piña y sandia, adquiridas de coquetas vendedoras vestida con traje tipico.

Cartagena fue puerto de esclavos y del Oro, de ahí su notoriedad política en la época de la colonia. No se si sea mito o leyenda, pero alguien me dijo, que desde su fundación, para minimizar incendios, la ley dicta que los edificios deben ser de piedra, y no de madera. Por lo cual la ciudad amurallada está bellamente preservada.

Continuamos caminando a la Catedral de Santa Catalina de Alejandría de Cartagena de Indias, quien vale mencionar es la del casamiento místico con Jesús, y de ahí a la Iglesia de Santo Domingo, al Teatro Heredia, al que lamentablemente no podemos ingresar por estar cerrado, a la Iglesia de Santo Toribio de Mangrovejo, donde no pudimos ver la bala de cañon incrustada en su pared y finalmente a la Iglesia de San Diego.

Vamos a las Bodegas, buscando almuerzo, pero sin éxito, y casi derritiéndonos sobre la muralla, concluimos el paseo en la estatua de la India Catalina... y luego de horas y horas se impone un merecido almuerzo con abundante Águila.

Después de almorzar aún nos quedan energías para caminar hasta el Castillo de San Felipe de Barajas y escalarlo, recorrer sus túneles y volver a bajar. Es una fortaleza colonial que protege el acceso a Cartagena desde el continente. Es imperdible en el horizonte, desde prácticamente cualquier punto de la ciudad. Tiene el estilo de otras fortalezas de este tipo, de las que hay en todo el caribe. En la Plaza al frente una estatua de Don Blas, con pata de palo, parche en el ojo y sin una mano. No se dejen engañar por la descripción, Don Blas NO es un Pirata del Caribe, sino el defensor de la ciudad, quien perdió todos estos miembros y otros más defendiendo la ciudad. IM PRE SIO NAN TE el Castillo de San Felipe, pero quiero mi cervecita, premio por los esfuerzos de la jornada!

Con los minutos cronometrados tomamos un taxi a Café del Mar, totalmente chill-out sobre la Muralla, y como su nombre lo indica, frente al mar. Nos tomamos unas frías, sentados entre antiguos cañones y de ahí salimos a toda velocidad rumbo a Boca Chica. O era Boca Grande? O Boca Mediana? No sé, a algún lugar en la parte nueva de la ciudad donde salen las Chivas, y... Oh si! ... Los Coches, que recordarán brillan por su ausencia en la Plaza de los Coches!.
Propongo que el municipio reorganice los nombres de las plazas para beneficio de propios y extraños!

Bue... apenas engullimos una Arepa rellena de carne, pollo y queso acompañada de jugos de guanábana, melón y mandarina cuando toca abordar la Chiva.

La Chiva es un Party-Bus. El bus es de lo más rustico, igualito a esos de cerámica que ya habrán visto en la casa de cualquier gringo que visitó Latino América.
La idea es recorrer la ciudad nocturna al ritmo del ballenato! Y pues si... rum Tres Esquinas, abundante hielo y coca cola.

Nuestra Chiva: La Quita Sueño. Debemos competir contra la Chismosa... con la que nos vamos pasando. Nuestra banda de abordo es la ‘Inquietos de África’ o algo así. El barman nos cuenta que se llama Encarnación o Concepción o algún nombre de virgen, y partimos al ritmo de “La Pollera Colorada’

Terminamos sobre las murallas, en el encuentro de las Chivas.
Amenizan la función bailarines garifunas de escasas ropas y cuerpos muy labrados - todos menos una exponente del arte Botero.
Y hay un chico con un perezoso. Tiernísimo el bichito que apenas se mueve y cuando te lo ponen encima te abraza súper lentamente. Y la luna llena y la gente loca. Coches tirados por caballos pasan, y sus cascos golpean el empedrado. Pequeñas olas quiebran en la playa y los flashes de las fotos no dejan de iluminar la muralla antigua... y QUE SE YO MAS! Apenas me da el cuero para mirar el infinito en estado semi catatónico.

Acabamos comiendo arepas de huevos de gallina virgen, lo que debe ser una de esas estupideces mitológicas que le venden a uno cuando es turista y sobretodo si lleva en cima varias aguilitas y rumcitos... Por mi parte me siento totalmente mitología Muisca. Me transformo en murciélago y en jaguar, y evoco poderes, saberes y hábitos de los dos animales para establecer los secretos de la vida y la muerte.
Mañana vuelvo a Londres. Emotiva despedida con Orlando y Belgica, quienes continuan con su luna de miel, digo su viaje de buceo.

Epilogo.
Entre las diez horas de caminata, las trepada de murallas y escaladas de castillos bajo el sol caribeño, la rumba de anoche y el “ponche” que tengo en el estomago, al día siguiente amanezco fatal.

Apenas la energía para transladarme al aeropuerto donde busco mi vuelo entre una lista increíble de vuelos a planetas insólitos y desconocidos: Cucuta, Bucaramanga, Quibdo, Mitú, Popayán, El Yopal, Nuquí y finalmente, Bogotá: Plataforma de lanzamientos Numero 346!
El vuelo de ida a Cartagena es TODO en bajada, y de más está decir, todo lo que sube tiene que bajar y viceversa... o sea, el de retorno a Bogotá TODO en subida! Como que te lanzaron de hombre cohete, escalando la cordilleraaaa!

En Bogotá busco el vuelo a Sao Paulo, no sin antes parar en El Corral, una institución de los sándwiches de lomito, y el secreto mejor guardado de Colombia -conste que mis 'amigos' colombianos no me pasaron el dato, sino que lo tuve que descubrir solito!

Extrañísima la disposición del aeropuerto. Por ejemplo... pasas inmigraciones y el duty free, pero recién después y por ultimo los Rayos X. Vas a la sala de embarque y te acomodás. Pero media hora antes del vuelo te hacen salir y formar una cola afuera de la sala para el ‘pre embarque’ e ingresan tipo comparsa con otra maquina de Rayos X, pórtico detector de metales, perros y mesas... en fin! Un carnaval total.

‘A no! Esa mesa no, que esta rota!’ Reclama la capa del abordaje y vuelta a hacer todo de nuevo. Y una vez que pasaste los Rayos-X te quedaste sin duty free, y una vez que hiciste el pre embarque te quedaste sin baño... serán medidas de seguridad? O será que se complican?

La espera del vuelo, también pintoresca. Niños de todas las nacionalidades americanas corren y gritan. Los brasileros azotan a sus niños y los amenazan de muerte. Los venezolanos fingen que nada pasa, y sus niños, totalmente agrestes, salvajes y sin límites te ayudan a entender a Chávez y el desorden que impera en ese país. El sistema colombiano parece ser el de repetir el nombre del niño una y otra vez en diminutivo e ir modulando los decibeles de acuerdo a la amenaza implicita. Por ejemplo: ‘Martita!!!’, que luego escala a ‘Martitaaaaa!’, y concluye en ‘MARTITAAAA! EH!???? Que me voy a enojar!’

Los matrimonios colombianos bien de guerrilla, se pelean a los gritos. Una mujer acaba de entrar en corto circuito, porque otra a la que acaba de conocer, le cuenta que en Sao Paulo no hay canales de televisión Colombianos y no podrá seguir su novela. ‘Pero NO mi amor!’ ‘Pero MUJER!’ ‘Pero MI AMOR!’...
Me voy pero no me quiero ir... de mas decir que este viaje no hubiera sido lo mismo sin todo el cariño de la familia y amigos de Lili.

Toca volver a Colombia del español perfecto, a explorar su mil millón opciones, y además me quedé sin visitar la tienda de Miguel Caballero, el sastre blindado!

Voy rumbo a Londres, una vez más y como siempre, encendido de ganas de venirme definitivamente para América latina.

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